CARTA DE UN PADRE A SU HIJA

Querida Hija:

Hola soy tu padre y necesitaba escribirte esto para decirte lo mucho que te amo. Desde el momento que supe que llegarías a este mundo me volví el hombre más feliz del mundo.

Cuando naciste estuve nervioso, la sangre, el dolor y los médicos ponen nervioso a cualquiera pero cuando pude cargarte fue la sensación más pacífica del universo.

Te prometo que estaré a tu lado en cada nueva palabra, en cada sonrisa, cada diente. Cuando caigas, solo basta que mires hacia atrás que voy a estar ahí para levantarte, para sobar tus heridas.

Te enseñare a manejar bicicleta, te enseñare a no tener miedo en las noches, te cargaré en mi espalda y recorreremos el mundo. También debes saber que nunca, que jamás podrá sucederte nada mientras yo este a tu lado, eres mi princesa.

Seguramente al ir creciendo se volverá un poco más difícil el mantenernos cerca, los chicos serán un motivo de discusión entre nosotros. Pero ten por seguro que estaré a tu lado para secar tus lágrimas cuando te rompan el corazón, y cuando algún noviecito quiera dárselas de vivo, no podrá, estaré yo, TU PADRE, para enseñarle que tienes quien te defienda, claro solo hasta que puedas hacerlo sola.

Cuando te cases te llevaré al altar, te entregaré al hombre al que decidas darle tu amor, tu compañía. Me aseguraré de dejarle muy claro, que JAMAS podrá hacerte daño, porque sería lo último que haga en la vida. No te preocupes hija, que si vienen problemas, porque siempre los hay, yo estaré ahí, no tendrás que permanecer al lado de nadie, si no quieres. Siempre podrás recurrir a mí, nunca encontraras mi puerta cerrada.

Ahora hija mía, yo sé que es difícil cumplir todo lo prometido. Pero te juro que seré el mejor PADRE que una madre puede ser. Porque en esta vida, nos toco estar juntas, nunca solas, sino juntas. Porque aunque tal vez no pueda llenar todos los espacios, ni todos los vacíos, me esforzaré al máximo.

Tu eres un regalo de Dios, nunca pienses lo contrario. Eres la luz de mi vida y la razón por la cual aprenderé a ser un PADRE, para ti. TE AMO

QUIERO QUE SEAN FELICES

Que difícil hacer feliz a todo el mundo, que difícil.

Y no estoy hablando de complacer a los amigos, a los maestros o a nuestros jefes, 

hablo de nuestra gente, de nuestras personas, quienes realmente nos importan.

Pero que difícil complacerlos, no se pude, o si?

Soy muy torpe, nunca fui buena para hacer feliz a nadie, empezando porque nunca tuve la menor intensión de ser feliz. 

Tal vez es una exageración, cuando niña quise ser feliz, y me imagine que estudiando mucho, mucho, siendo buena hija, portándome bien lo lograría.

Pero la realidad no golpea tu rostro, simplemente te patea el culo, te arrastra por la vereda y una vez tirado en el suelo te escupe.

Poderosa realidad que me toco saborear hace poco, al tener a mi hijo enfermo, poderosa realidad. 

Estamos solos, así que levántate deja de esperar que venga el chapulin colorado, porque no vendrá.

Increíble notar que por mas cínica que pueda ser una persona, en este caso obviamente yo, aun esperas. 

Es algo inconsciente, no sabes que esperas pero esperas. 

Esto me sorprende por que les diré cual es mi filosofía: Nunca esperes NADA de NADIE, las personas no te ayudaran, no te amaran, no te comprenderán.

Pero no se trata de repetirlo como un resentido social, se trata de interiorizarlo. 

Yo no pienso que las personas son así porque son unos monstruos y yo la pobre victima desvalida, es simplemente que cada persona es un mundo tiene sus propios fantasmas, sus propios demonios y sus propios problemas. 

Nunca esperes NADA de NADIE, pero cuando suceda, cuando encuentres una mano amiga, una sonrisa o una palabra de aliento te sorprenderás, te alegras y sera muy bonito.

Eso me funciona perfecto, nunca espero nada, siempre pienso lo peor. y de vez en cuando sucede algo que me sorprende, alguna muestra de que el mundo donde dejare a mis hijos no es tan malo.

Pero así de cínica como les he explicado que soy, aun me sorprendí en esa ocasión esperando algo, no se bien que, no se exactamente que era, pero eso nunca llego.

Hacer Feliz a quienes amas no es sencillo, porque lo que tu consideras felicidad, no lo es para ellos, la felicidad es tan relativa como el amor.

Estoy fallando, y no una falla como la del colegio o la universidad, donde te dicen: de los errores de aprende, aquí no hay borrador ni liquid paper, los errores clavan puñales en el alma de tus seres queridos, son cicatrices que no se borran.

Que difícil hacer felices a las personas, no se que puedo hacer, porque en el camino de su felicidad parece que les voy estorbando. 

Como cuando mama entraba a tu cuarto, estabas viendo una película y te empieza a preguntar un millón de cosas, tu quieres seguir viendo la peli y mama quiere que estés bien, y te pregunta si quieres algo, te ofrece comida, bebida, de todo. y claro esta te lo comes rápido, pero mientras ella interrumpe tu pelicula, lo único que piensas es: YA TERMINASTE?

Es algo así, quiero hacer lo correcto, lo preciso, ser efectiva en conseguir que sean felices, porque cuando una ama a alguien solo busca eso, que sea feliz, pero no lo consigo.

Lo pienso, trato de encontrar la formula, pero cada intento resulta peor, no solo no consigo que sean felices sino ademas les provoco la mayor infelicidad, que ironía.